Los edificios administrativos pueden albergar un conjunto de actividades muy diversas y variadas y, por lo tanto, su proyecto debe proporcionar la flexibilidad de los espacio mediante el diseño de forjados con amplios vanos, soluciones de paredes interiores robustas, pero también ligeras y sencillas de ejecutar, así como soluciones de fachada que garanticen seguridad, confort, y aislamiento térmico y acústico.